Nacional N-632 y aledaños. Un viaje por el recuerdo. 1ª parte (Edición 02/05/2023)

Buenas noches.

Vamos a iniciar una ruta por la carretera transcantábrica, en su vía asturiana de referencia junto a la N-634. La N-632.

Una gozada de ruta que pasa por lugares bien variados y dispares.

Veamos el primero. Una vaguada, más allá de la bajada que existe en el kilómetro 109. Detenidos en Carcedo, existe éste punto.

Recordad, mejor pinchad sobre las imágenes para verlas con una calidad más adecuada.

Lo primero que haré es inventario de un bonito y típico elemento que acaba de desaparecer.

No transcurrirá mucho tiempo hasta que empiece a mostrar los tramos antecesores de ésta ya mítica ruta, y además de las rectificaciones y mejoras de trazado que vamos a ver con frecuencia en el blog, habrá más salseo aún entre Caminos Carreteros y Caminos Reales, está empezando a quedarse un plano bastante majete.

Vamos pues, con lo que nos concierne ahora. La ruta N-632, con sus diversas mejoras durante las décadas del pasado siglo, hasta la apertura a tramos de la A-8 en la década de 2000, e incluso alguno que tuvo que esperar hasta 2012, por increíble que nos parezca en la actualidad.

La abuela, la madre y la nieta, ésta ya autovía, juntas compartiendo el espacio en el pequeño valle.

Lo cierto es que las dos primeras parecen ir muy juntas. Su relación es casi íntima. No obstante, la intermedia no ha tenido reparos en asestarle más de un zarpazo a la carretera más antigua.

Habéis visto unas imágenes de la más antigua, justo antes del tajo asestado por la variante, que se ha quedado tan ancha, con dos carriles de subida y uno de bajada hasta la apertura del viaducto de la A-8 que pasa por allí.

Nos encontramos en la parte del trazado que no ha sido necesario indicar en rojo, debido a que sigue existiendo y, es más, se ha beneficiado de un asfaltado integral que, curiosamente, no le ha llegado aún a la carretera más moderna.

La modificación del trazado en éste punto ha sido notable. Veamos una captura actual, junto con un mapa de los años 50.

Pero posteriormente nos aparece una fotografía de uno de los Vuelos Americanos, lo que da todavía más exactitud que el mapa (mapas que ya eran MUY buenos en su época, y aún son bastante precisos lo que es digno de no pocos elogios)...

Teniéndolo en cuenta, se puede "jugar" a hacer una superposición de ambos.

Así, y teniendo en cuenta los restos que quedan por la zona además del resultado de lo anterior, se puede ya asegurar cuál fue el trazado exacto de la N-632.

Enseguida podemos empezar a ver algunas señales en el propio lugar.

Éste punto tan estrecho no está modificado. Es el original. Y si con un vehículo tan compacto ya se deja ver tal como era, qué podríamos decir de hace pocas décadas cuando por aquí pasaban camiones y autobuses. Éste tramo sólo se cambió completamente abriendo la nueva calzada en la década de los 80.

En las dos primeras imágenes de Google Maps en planta vemos cómo era ésto realmente. El que iba sobre el río La Ferrería ha dejado de existir.

Antes de seguir vayamos un momento al kilómetro anterior, el 109, donde vamos a ver algo.

Ésta es la bajada del kilómetro 109, que llega desde el concejo de Castrillón.

Nos hallamos en una pequeña curva rectificada que sirve a los que llegan desde Carcedo y Pravia para entrar a la estación de servicio pero, oh maldita sea, su acceso es nefasto. Así no sirve, y hay que acceder como se pueda ya que está permitido pero ojo... Con cuidado.

También da servicio al apeadero ferroviario. Pero también éste camino está hecho unos zorros.

La estación de servicio ha cambiado de marca, y de los precios, a día de hoy 10 de junio de 2022 mejor ya ni hablo siquiera. Basta con ver las imágenes.

Ahora vámonos un poco más allá. Recordemos lo que aconteció hace unos 12 años.

En el plano se puede observar la gran carretera nueva de trazado estilo Redia, con 2+1 carriles junto a las dos curvas, una de las cuales quedó sepultada por una plataforma más ancha, cómoda y segura, bien asfaltada de verdad (hoy ya le viene bien una capa nueva). Fue tapada con toneladas de tierra, ya que con el acceso a las últimas casas redirigido no tenía continuidad, así que la vegetación se ha ocupado de ir enterrando lo poco que quedaba libre, cuestión de algunos metros.

No obstante es una lástima ya que con sólo existir la primera curva, sería interesante contemplar la diferencia en cuanto al radio, el peralte, el estado de la capa superficial del firme...

Una gran carretera de tipo Redia, con dos carriles de subida más que necesarios y uno de bajada, fue abierta en los 80 para dar cabida a un tráfico que ya no sólo elegía la N-634 para desplazarse y aunque quedaba mucho aún por hacer, todo éste nuevo trazado les permitía llegar a Soto del Barco para tomar la C-632 por ejemplo, hoy una autonómica que da servicio a muchas poblaciones. Por ahí se llega a Pravia, Cornellana, Salas...

El resto de la N-632 esperaría hasta finales de los 80, e incluso el último tramo (el de Cadavedo) fue abierto en 1996, por muy imposible que parezca. Ya veremos buena parte de esas infraestructuras.

Y aquí en la primera curva de subida, aunque en los últimos años se había dejado una obra tapada por un bache que era capaz de descolocarte de la trazada si subías un tanto alegre, nunca pasó nada más allá de soportar un tráfico inmenso.

El problema se produjo aquí, en la segunda curva. Amplia, peraltada, que se iba abriendo poco a poco. ¿La veis? Se halla detrás del guardarraíl.

Y todo porque durante 2010 cayó una tromba de agua descomunal, como no se recordaba otra desde los años 40 literalmente. Llegó a tragarse una carretera local y a llevarse un negocio, con su vivienda sobre él al Cantábrico, por no hablar de los innumerables desperfectos que provocó.

Uno de éstos desperfectos ya se había producido cuando cayó la tromba. Ésto sucedió en 2009.

Poco a poco, apareció una pequeña grieta en medio del apoyo de la curva y que día a día fue creciendo, se transformó en un bordillo y a los pocos días el tramo entero quedó cortado al tráfico de vehículos a motor, salvo los de dos ruedas que podían pasar por la antigua calzada: una estrecha recta de unos 30 metros que había quedado allí, a la derecha de la grieta y a la cual hasta entonces no se le había vuelto a hacer el mínimo caso.

La rejilla de desagüe. El peralte de unos 6° facilitaba que las aguas, que fluian como ríos, no estorbasen mucho a los conductores. Lo que caía de la lluvia se iba directamente hacia la canalización, junto al bordillo.

La flecha de retorno al carril derecho, evidentemente un tanto deslizante. Nadie se ocupaba de andar con las fresadoras durante aquella época. Las veías y punto, que era su función.

La fotografía de la pequeña recta se ha perdido, pero Google Maps y el muy buen editor de imágenes del Galaxy A51 se encargan en parte de paliarlo. Aquí vais a ver un plano. El trazado rojo, más aproximado imposible fue el más antiguo y el marcado en verde, el más moderno, o sea la curva que se cayó abajo. La recta entre ambas curvas era unos 20 metros más larga.

En la siguiente imagen se ve la anchura real. Tres carriles, y sin olvidar que en aquellos años el arcén del carril de bajada media literalmente centímetros, y que los carriles nuevos son algo más anchos que los de aquel entonces. Y aún así, la IMD de más de 25.000 vehículos bien la soportaba. Vaya que si la soportaba.

Tan sólo en la variante de Avilés abierta entre 1991 y 1993 llegaba a registrarse una IMD mayor, de más de 33.000 vehículos en cualquier caso.

El carril sobre el cual se asientan las balizas era el carril especial, en aquellos años de tráfico lento al haber cambiado la normativa hace tiempo. Hoy también sería de uso obligatorio, por mucho que les pese a los tuercerruedas.

Y ahora veamos la que se organizó. La curva ha dejado de existir, pero ésta vez nadie la ha recubierto con tierra. Se ha ido cayendo ella sola poco a poco hasta estar a más de cinco metros por debajo del resto en la actualidad, una auténtica burrada.

Se aprecia bien dónde estaba la línea continua que separaba ambos sentidos. Hoy la nueva plataforma ha tenido que reaprovechar esa antigua recta del trazado más antiguo para que la N-632 vuelva a estar operativa.

Unas fotografías de hace pocos años nos revelan algo más, como que en la primera curva de subida el ancho era algo mayor. Las biondas y las balizas estaban algo más apartadas a la derecha, pero dejaron de ser útiles y bien se reubicaron, bien fueron retiradas.

Y todo ésto, ¿por qué? Es decir, tuvo que existir un motivo para semejante daño masivo infligido a la plataforma de una carretera nacional que, no lo vamos a negar, era estupenda para el lugar donde se hallaba. Y halla: pero esos tiempos ya pasaron.

ANTECEDENTES

Meses antes de ésta edición, hablé sobre el suceso de la N-634 en El Bao. Pues aquí pasó algo similar pero con la inmensa fortuna de que la autovía ya estaba en servicio desde hacía un tiempo, y al menos la molestia fue moderada.

Bueno, moderada para quien no fuese vecino de Carcedo, Santiago del Monte, Naveces, Folgueras o quien no tuviese negocios en la zona de Carcedo, el Alto del Praviano, Carcedo y esa zona.

Lo que pasó aquí empezó en 2009. Por alguna razón desconocida la segunda curva de La Herradura resultaba dañada. Hacía un tiempo que había cierto desnivel pero lo que nadie nos esperábamos era que apareciese un escalón que, poco a poco, se transformó en un colosal desperfecto que... Nos cerró la N-632.

Y los que no nos gustan las autovías o no las necesitamos... A dar un rodeo por la N-643 y tomar la autovia de conexión con la A-8 que se vio con la limitación de acceso a ciertos vehículos inactiva de manera temporal.

LOS HECHOS

Obtener un paso más cómodo y más seguro, siempre fue un objetivo de las mejoras aplicadas a la evolución de las carreteras. Eso fue lo que se consiguió a finales de los años 80, cuando toda la nacional entre Avilés y Las Dueñas pegó un cambio de varios abismos - y nunca mejor dicho.

Desaparecieron ciertas zonas peligrosas como curvas draconianas enlazadas que se suavizaron, aunque siguen existiendo aún hoy. Un tremendo estrechamiento que habéis visto antes se sustituyó por una calzada con tres carriles uno de ellos especial. También travesías como Muros de Nalón, Somao y El Pitu se sustituyeron completamente así como las de San Juan de Piñera y la misma Piñera. Todas ellas, relevadas por una estupenda y rápida variante. La que aún así continuaba con un nivel tremendo de tráfico pesado a todas horas, y cuando digo a todas horas me refiero a todos los días del año. El ruido no se alejaba de las casas. Cruzar o salir de un stop se convertía en un ejercicio de alto riesgo, y menos mal que en varios puntos vitales se hicieron pasos elevados y subterráneos para peatones.

Na tenía que envidiar a cualquier nacional radial de las que parten de Madrid a seis distantes puntos de la península. Y ésto no es ninguna flipá mía ni ninguna exageración.

El tema lo trataremos en el siguiente enlace, que podréis

Dicho todo ésto, prosigamos.

No vamos a pasar por alto tampoco el estado del resto. El asfalto ya no es el mejor, es drenante y rugoso pero ha perdido adherencia. En la bajada desde Castrillón se apreciaba junto al guardarraíl el antiguo firme del tramito que pasaba sobre el río Ferrería, y también se puede apreciar la especie de elevación de la antigua carretera pero sea por el motivo que sea, ya no existe ni siquiera el puente. El resto se halla bajo una vegetación arbustiva exuberante.

Y si le echáis un vistazo al carril de bajada desde la estación de servicio, veréis que está dañada. Bueno, lo estaba. Si aquella cacho de grieta se abrió en 2009, la gigantesca borrasca de 2010 que mencioné al inicio fue lo que causó que el carril de bajada se cayese abajo y parte de él se quedase apoyado en la doble bionda de protección.

La de molestias que la apertura de dos grietas causó a los vecinos y comerciantes de la zona está más que documentada, así como las noticias de todo lo acaecido. Hoy día seguramente podáis ver aún un bloque enorme del carril de bajada pendiendo del guardarraíl.

Lo que veis en la imagen es posterior ya que se construyó una escollera, se tendió un talud y se rehízo la carretera. La leve ondulación, casi imperceptible salvo por la lechada bituminosa aplicada fue causada cuando el terreno quedó asentado definitivamente sobre la escollera. Ahora ya no hay nada que temer.

Bastante tuvieron ya los vecinos. Fue conocido como El Kilómetro Maldito. No hay mucho más que añadir al respecto. Menos mal que la carretera local CT-1, la N-643 radial y la nueva autovía al aeropuerto contribuyeron algo durante semejante situación.

La verdad es que con sólo hacer clic en éste enlace se recordará muy bien lo endemoniado de la situación.

https://www.lne.es/asturias/2010/06/14/atrapados-grietas-21324072.html

La que se había liado allí en año y medio en una carretera nacional de primer orden, y menos mal que hacía unos dos años que estaba la A-8 en servicio. Esa grandota que va sobre el viaducto.

Pero bueno, una vez visto ésto pasamos por el Alto del Praviano. Con esa vertiente castrillonense tan enrevesada pero la que tomaremos en el descenso que nada le tenía que envidiar puesto que cuando aún no se había abierto la A-8, era prácticamente como ir en Los Autos Locos. 😂

Hace 20 años, decelerar para parar aquí a tomar un refresco o a comer era hacer oposiciones a que el típico gilipollas comeculos te sacudiera un buen josconcio por alcance: la mejor idea era colocarse paralelo al culo del primer camión de la fila en la subida, pegar un acelerón justo al acabarse el carril izquierdo y que el resto se lo tuvieran que comer con patatas. Sólo así podías decelerar a tu antojo al llegar aquí para parar a comer. De todas maneras siempre me la sudó hasta el punto de que, si me veías decelerar y me pitabas, te llevabas un cierto frenazo de regalo por imbécil, así a la próxima siempre se andaban con más ojo, lo que más les valía.

Recuérdalo, si tocas el paragolpes del que llevas por delante, la culpa es tuya. La distancia de seguridad se creó para algo y no me valen tonterías de ningún CUÑADO ni ningún flipis con el bemeta consumido de 6ª zarpa que lo va a dejar tirado en la siguiente travesía. Las cosas como son, y no me valen ningún tipo de excusas ni justificaciones.

Un curioso vehículo que hace pocos años me topé en su aparcamiento... Y puede parecer muy pequeño pero se me hace más que suficiente cuando toma la talla de un Jumpy o similar.

De todas formas se me hace una idea cojonuda.

Ahora al fin llegamos a Soto del Barco, que ya iba siendo hora 😂

Existe allí a la entrada, un antiguo símbolo del gran tráfico existente, y de que era mejor no tratar de cruzar porque es que ni paso de peatones había. Un paso inferior con rampa y todo porque si tratabas de cruzar podía pasarte cualquier cosa, ninguna buena desde luego.

Tras el viaducto sobre el Nalón, del cual ya hablamos y va aquí una imagen del tiempo durante el que se reparó doblando la cantidad de pilares de apoyo en el lecho del río y acondicionando su tablero...

...existe la antigua carretera pero que hoy está cortada por una barrera, y sólo sirve a los vecinos y paseantes. Así estaba hace ocho años... Estuve hace una semana, y se halla incluso peor. Desde luego con el asfalto sucio. Una vergüenza, pero ésto no es lo peor del reportaje.

Y nos vamos algo más allá. Seguimos con la aventura. Veamos cómo era todo ésto hasta la zona de Artedo, donde la moderna N-632 desaparece engullida por la A-8 debido a lo bien construida que estaba.

Tenemos que hacer una breve parada en el acceso a Muros de Nalón...

Porque incluso antes de llegar hay una pequeña sección, una antigua curva con casas habitadas. Vamos, que no está abandonada, de hecho su estado es muy bueno. Allí nos topamos con la antigua denominación de la carretera.

Existe otra pequeña curva, pero en medio de "la nada" y que sin acceso alguno a viviendas o fincas ya está desapareciendo entre la vegetación.

Muy pocos metros pasan antes de que le hayan asestado otro tajo al terreno, para reducir la pendiente y de paso eliminar parte de la travesía, construyendo una curva de amplio radio bajo el talud. Y todo ésto en el año 1989, ahí es nada.

Tres imágenes con una meteorología algo más benevolente. Se ve que el trazado antiguo de llegada fue cortado de un hachazo y se tuvo la grata idea de poner allí una mini área de descanso con unos columpios infantiles, éstos últimos renovados hace muy poco.

Además, justo allí hay dos o tres alojamientos turísticos.

Ahora, veamos qué tal era la zona hasta 1988, sí 1988, y qué tal es en la actualidad. Aunque la imagen aérea es más antigua da igual: así permaneció hasta el acondicionamiento finalizado en 1989.

Había que cruzar las dos partes de Muros de Nalón hasta que la actual carretera, que aún así tiene su miga se quedase terminada y abierta al tráfico.

Tremendo.

Y todo ello queda así resumido en un gif, especialmente realizado para la ocasión. Así era y así quedó. La primera parte de la travesía, eliminada por una variante y más allá, una explanación para obtener un más que necesario carril de tráfico lento (que, insisto, ya ni se llaman así, y son de uso obligatorio, de hecho es el central el especial para tráfico rápido, o sea que está ahí para que adelantes).

Siguiente contracurva suavizada por la curva de radio medio pero aún así mucho más amplia para que justo después se evite la tremenda curva cerrada de subida con el simple método de construir una recta que, con sus 2+1 carriles, evita la segunda parte de la travesía.

Y eso que Muros de Nalón es bien bonito, uno de mis pueblos favoritos de todo Asturias. Pequeño y recoleto, limpio, bien cuidado, con elementos históricos, la plaza con el ayuntamiento y la iglesia allí, juntitos... En general, es una localidad muy bonita: detenéos en ella, merece la pena.

Ahora hacemos una parada. Un claro símbolo de una ruta atestada, saturada y que no tenía pausa ni de día ni de noche, salvo algunos raros momentos puntuales.

La pasarela peatonal sobre la calzada. Justo al lado del restaurante donde se corta la antigua curva, y de unos alojamientos turísticos..

Evidentemente era mejor ni soñar en cruzar por la calzada: nada que envidiar a la ruta de Madrid a La Jonquera. Os lo aseguro.

Como ya he dicho, aquí se superaba la IMD de 20.000 vehículos al día y a veces, de sobra.

Sigamos hacia el occidente que ésto marcha, desde luego que el recorrido promete.

Y más allá, como veis en el plano había una curva cerrada para acceder a la zona del casco urbano, la iglesia, el ayuntamiento y la plaza, pero ya no existe. El motivo...; que la construcción del carril especial para tráfico lento (hoy, de obligado uso) la hizo desaparecer... Pero allí sigue el resto, dando a entender la pedazo de curva que existía para acceder a éste bonito pueblo.

Arriba vemos ésta antigua calzada cortada, con acceso prohibido ya que no lleva a parte alguna (salvo a caerte esmorrao a los carriles de subida...), y sobre los últimos metros de uno de sus carriles se asienta el talud que soporta una nueva calle.

Y aquí se ve realmente cómo era el acceso al pueblo. Con una cacho curva cerrada de alucinar y acto seguido la pendiente. Menos mal que en aquella época los vehículos pesados tenían, todos, dirección asistida.

Las condiciones eran draconianas a mediados de los 80. Era un recorrido idéntico al resto de la N-632.

La panorámica de lo que hace no mucho tiempo fue la susodicha curva. Los dos carriles que se ven a la derecha, un viraje tremendo a la derecha y a subir una cuesta hasta la travesía.

Tremendo.

Pero no es lo único que Muros de Nalón nos ofrece. A dos kilómetros podemos irnos a la Playa de Aguilar pero ojo, MUCHO ojo porque es una playa peligrosa, de fuerte oleaje y durante la pleamar, directamente casi no hay playa... Y la carretera, encajonada entre el acantilado y el arenal se sumerge en nubes de salitre a poco que el mar se halle embravecido.

La carretera de acceso no se queda corta. Éstas fotografías fueron tomadas en otoño, y se nota. Es cuando más pintorescas resultan éste tipo de visitas.

Aquí se ve la carretera de la playa, totalmente encajonada. Entonces, el 🅿 del final se había venido abajo, y las barandillas se hallaban ya algo afectadas por la sal. Afortunadamente ésto ya ha sido corregido, y las barandillas han vuelto a ser tratadas.

Pero ojo 👁 son barandillas de tipo peatonal, nada de barreras que te salven de caer abajo. ⚠

Ya nos hacemos una idea de cómo es la playa local de Muros de Nalón y lo castigada que está la costa por el mar, con sólo ver ésta imagen tomada en bajamar, con todo tranquilito... Si no es así, más te vale que después de volver a Muros te vayas derecho a la estación de servicio y metas el coche en el túnel de lavado que tiene, y no es broma.

Así que de vuelta en Muros de Nalón, nos relajamos un poco en el pequeño y bonito centro urbano.

Pero todo ésto no ha hecho más que empezar... El resto de la N-632 tampoco se queda corto eh, que también tiene su ración de tramos nuevos salvando montes y barrancos. Veámoslo.

No es ni necesario hablar sobre la diferencia de trazados, la dificultad de la orografía, ni de las obras que se tuvieron que hacer para salvar semejantes montes y barrancos. Las imágenes lo dicen todo.

Sólo mencionaré que si nos vamos a Cadavedo, y tomamos el último kilométrico antes de la rotonda y el primero tras ella hay una diferencia de 11 kilómetros entre el trazado de la N-632a y el de la N-632... Y con eso basta. No mide ni 162 kilómetros en su trazado más antiguo cuando llega a la rotonda de Canero y se une a la N-634 poniendo fin a su recorrido.

Y ahora nos centraremos en éste lugar. Es el Barranco de Santa Olaya. O de Santolaya, como se dice por aquí.

Porque se adaptó hace un tiempo como senda peatonal y ciclable, pero sirve también para el acceso a un coto de caza. Bueno, pues incluso en todo éste asunto hay discordancias. Llegaremos a eso.

Veamos primero la senda, que es literalmente la calzada de la N-632a, pura y dura.

El trazado que lo reemplazó. Un viaducto en curva, con un pequeño arcén y el guardarraíl que protege la estrecha acerita.

Y un tramito muy corto de la calzada original. Ni siquiera 10 metros mide.

Ahora nos metemos de lleno en el Barranco de Santa Olaya. Seguimos oyendo resonar las juntas de dilatación.

Para llegar a la antigua curva, y ver que no conserva ni pretil ni guardarraíl alguno. Si te caes, te vas derecho al río. Ni siquiera se puede ver el puente, por la vegetación más exuberante que en casi cualquier otro lugar.

Pero, ay ay... Algo no va bien, y lo descubrimos cuando el agua cruza la calzada sin que nada la detenga ni desagüe. Bueno, mientras sólo sea eso... Vale.

La verdad es que salvo algún pequeño argayo, el resto se mantiene bien. Pero también vamos absortos en los viaductos. Al fondo vemos el de la variante, arriba los de la autovía. Incluso vemos más allá el trazado del ferrocarril.

La verdad es que el sitio éste mola mucho, pero que mucho.

Y ya casi llegando a los viaductos de nuevo, el camino se bifurca. Elegimos el de la izquierda y... Bueno, mala idea. Es el original de la N-632. Ha sido tajado por la A-8... Chasco. Demos pues la vuelta.

Pero una vez desandados esos escasos diez metros, y tomado el camino alternativo, parecía que iba a salir todo bien.

¡ ¡ J A ! ! Qué iluso... ~~

No sé si quiero saber la cara que se me quedó al ver que todo acababa en un andurrial chafado por las escorrentías de años y años de torrentes de agua incontrolados.

¿De verdad alguno se cree que me iba a meter a escalar por ahí? ¡Y sin saber siquiera qué habría esperando al otro lado! Anda ya... 😒

La cara tuvo que ser épica. Así que me veía a los conductores que pasaban como si nada por la variante de trazado. Sí, claro que me voy a poner a caminar por ahí ahora... Ni de broma. A por el coche pues. Y yastá.

Afortunadamente, una vez con el coche se puede llegar a donde quieres sin problema. Faltaría más, que la N-632 estuviese dañada... Y aún así, hay un tramo de bionda a reparar en el viaducto. Ha hecho su función, de lo cual me alegro pero lo dicho, hay que reemplazar algo ahí.

Dicho ésto nos situamos frente a otro tramo añejo. De ésta curva recuerdo pasar por ella ya al volante, hace unas dos décadas al volante del Rover 214 Gsi catalizado... Éste no recuerdo si la llegó a catar, pero estoy casi seguro de que no.

De todas formas, es lógico que se haya dejado ahí abandonada. Contiene toda la escorrentía del monte, que desciende por un paso inferior para caer de inmediato de nuevo al riachuelo que esparce el barro y los sedimentos por su curso, lejos de la carretera nacional a donde nunca deberían llegar, y ésto parece que se sirve y se basta para la función que se le ha dado.